Dónde colocar lamas antiestáticas

lamas antiestáticas

En determinados contextos, no pueden faltar las lamas antiestáticas, uno de los productos más versátiles cuando hablamos de PVC flexible, material termoplástico fabricado a base de resinas libres de ftalatos y aditivos como agentes plastificantes libres de DOP. 

El PVC destaca por muchas cosas pero no por poseer propiedades antiestáticas. Para conferirle esta propiedad se le añade grafito. Junto con las resinas y los plastificantes se logra un material granulado al que se da forma, en este caso, de lamas. Para fabricar estas lamas antiestáticas se recurre a un proceso de extrusión. El resultado es un producto que destaca por su alta flexibilidad y versatilidad. Además el PVC es un material anticorrosivo que resiste perfectamente en multitud de ambientes. 

Aplicaciones de las lamas antiestáticas de PVC 

La más común es el cerramiento o la separación de espacios de toda clase y condición. Por ejemplo, es ideal para las salas de los laboratorio que han de permanecer 100% limpias. Estas lamas son muy resistentes y fáciles de colocar. Además su mantenimiento es extremadamente sencillo. Evitan que haya electricidad estática, algo clave en las salas blancas de los laboratorios que comentamos. Las podemos fabricar transparentes, translúcidas u opacas según tus necesidades. Son ideales además para evitar que pase el polvo y el humo. La versatilidad también queda patente en el hecho de que estas lamas puedan ser fijas o correderas.

La propiedad antiestática es una obligación contenida en la directiva ATEX (atmósferas explosivas). Algo a tener presente siempre en el ámbito industrial. Insistimos en que el PVC es un material que destaca por su flexibilidad y capacidad para aguantar altas temperaturas. Estas cortinas de lamas de PVC flexible ofrecen gran resistencia al paso del tiempo y evitan que se expanda el fuego. 

Nuestras lamas son transparentes o traslúcidas y permiten la visión a ambos lados. Esto es clave en el mundo industrial para circular en espacios donde haya lamas de este tipo y hacerlo con seguridad. Zonas en las que hay una constante circulación de personas, vehículos o maquinaria. Cuando se traspasan, las cortinas vuelven a cerrarse de forma automática sin que el operario tenga que hacer ningún esfuerzo. Estas lamas son además casi imposibles de romper y resisten estupendamente hasta en los ambientes más hostiles. Además, apostar por soluciones transparentes permite mejorar las condiciones de iluminación interior y mejorar en materia de ahorro energético.