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Si en las cámaras de congelación solamente hay puerta y no cortinas de lamas, en cuestión de segundos se producirá un intercambio de temperaturas que acarreará numerosos problemas.
Con la llegada del verano y el aumento de la temperatura ambiental, la utilización de una cortina térmica aislante se hace imprescindible si queremos evitar que se arruine la producción. Te explicamos por qué puede suceder esto y cómo solucionarlo.
¿Por qué las cortinas de lamas son importantes en las cámaras de congelación?
La exposición de los alimentos al frío mediante la refrigeración y la congelación es una forma muy efectiva y sencilla de ralentizar el crecimiento de las bacterias, evitando así que el producto se estropee o sea un peligro para la salud. La congelación permite preservar su conservación.
Las bacterias están presentes en el suelo, el aire, los alimentos que comemos… y cuando estos tienen temperaturas favorables, se reproducen con mucha facilidad. Es decir, crecen más rápido en temperaturas entre 4 y 60ºC. La única forma de protegernos frente a ellas y proteger nuestros alimentos es colocándolos en una cámara a menos de 4ºC y haciendo que la temperatura de dicha cámara no descienda.
¿Qué ocurre si un alimento se descongela?
La utilización de lamas en cámaras de congelación es la solución a numerosos problemas de cambios de temperatura.
Impiden la pérdida de frigorías, haciendo que el producto que estemos conservando no pierda sus propiedades ni se eche a perder. Cuando un alimento se descongela, suelta una gran cantidad de líquido irrecuperable que hace que se seque. Además, durante la congelación se inhiben varios procesos, entre ellos los microbiológicos, que al descongelarse el producto se activan de nuevo. El agua producida al descongelarse, sirve como caldo de cultivo para el desarrollo de microorganismos que dañarán no solo la calidad del producto, sino también la capacidad de ser utilizado como alimento, provocando daños en el sistema digestivo si los consumen.
¿Qué hacen exactamente las lamas?
Ese tipo de cortinas con lamas permiten que:
- El intercambio de temperatura exterior/interior no se produzca o sea mínimo
- No se pierdan frigorías y la congelación se mantenga
- No se cree escarcha en los intercambiadores
- Permiten la existencia de salas a diferentes temperaturas
- Protegen de las inclemencias del tiempo
Otra de las grandes ventajas que las cortinas de lamas suponen es el elevado ahorro energético, suponiendo una importante reducción del gasto en su factura de electricidad.
Además, en Ypsis ponemos a su disposición varios tipos de cortinas de lamas y nuestros más de 30 años de experiencia en el sector nos permitirán asesorarle de la mejor manera para el aislamiento de sus cámaras de congelación.
